Sobredosis de plasma

He pasado màs de 16 horas frente a una pantalla de plasma. Las imàgenes que me rodean estan en modo rgb. El vaso del cafè, el cigarrillo de la tarde, el tiquete del viaje en bus; mi entorno a adoptado formas de fotòn. La imagen que percibo de mis manos son solo càpsulas de luz que rebotan sobre mi epidermis. Luz proviene de una pantalla de 19 pulgadas y varias làmparas alògenas. Justamente ayer leìa en la casa de una conocida, aun no amiga, que hoy està estrenando gata -se llamarà Malteada- algo sobre los medio de transmisiòn de informaciòn. Una chàchara entretenida. Las especificaciones tècnicas de esta pantalla dice que puede generar màs de 30 millones de colores. Yo me conformo con el gris del cielo o el verde de los pastos. Pasto, una ciudad que me trae buenos recuerdos. Recuerdo es el barrio donde crecì. Crecì bajo un techo blanco. Blanca es la ciudad donde vivo. Vivo?

Faltan 20 para las 21 y la noche va a acabar. Voy en flota para mi casa a bañarme y fumar.

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