Freud

Tres dimensiones del comportamiento humano condensado en tres zonas del cuerpo.

Boca: El primer contacto con el mundo, instintivo, programado por los genes. Amamantar es la primera acción que sabemos que nos produce placer. En la lactancia, el bebé está en función del goce total. La boca es el primer órgano a través del cual nos comunicamos.

Manos: Algo análogo a la función de los dientes, el acto de agarrar implica la interacción con lo inanimado, la aprehensión significa la capacidad de auto abastecerse, alterar el ambiente que rodea a la persona mediante el manejo de algún instrumento, ser propietario de algún elemento. Es la forma primaria del coleccionismo.

Ano: Al controlar la defecación, el bebé pasa a ser un ser social ya que puede programar sus actos corporales en función de un comportamiento común, descubre los límites de las acciones, tanto de las acciones mecánicas cuanto de las simbólicas. En pocas palabras, es el momento en que el infante se introduce en la cultura.